PLAN DE DIAGNÓSTICO - PRÁCTICAS LABORALES (SAYAUSÍ, CORAZÓN DE JESÚS)
ANTECEDENTES
Los antecedentes de la institución se remontan en el contexto geográfico de la parroquia rural de Sayausí, ubicada en el cantón Cuenca de la provincia de Azuay, Ecuador, donde surge el proyecto "Mis años dorados". Sayausí limita al norte con la parroquia de Chiquintad y una parte de la Provincia del Cañar, al sur con la parroquia de San Joaquín, al este con Sinincay, y al oeste con Molleturo. La parroquia está compuesta por 13 barrios, incluyendo Bellavista, Buenos Aires, Corazón de Jesús, Gulag, La Libertad, Los Ramales, Marianza, San Martin, San Miguel de Putuzhi, Santa María y San Vicente.
A través de un trabajo investigativo realizado dentro del Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) se logra sistematizar información en cuanto a la historia del barrio Corazón de Jesús y su ubicación geográfica que es específicamente el sector en el que nos vamos a enfocar para nuestra intervención. Corazón de Jesús es un barrio que antiguamente era parte del vecino barrio Bellavista. Sin embargo, un grupo de personas de Rosaapamba tomó la decisión de separarse y fundar el hoy conocido barrio Corazón de Jesús. Mismo que está ubicado entre los barrios de Bellavista, San Vicente y barrio centro.
En este contexto geográfico, el GAD Parroquial de Sayausí ha puesto en marcha el programa "Mis años dorados", una iniciativa diseñada específicamente para atender a las personas adultas mayores de 65 años que residen en la parroquia. Según los datos proporcionados por María Gutiérrez, la promotora encargada de impulsar el proyecto en colaboración con el GAD, la población de adultos mayores en los 13 barrios de Sayausí asciende a un total de 8,474 personas, de las cuales 604 adultos mayores están inscritos en el programa y figuran en la base de datos gestionada por el GAD Parroquial de Sayausí.
Este proyecto se alinea con el Plan Nacional de Desarrollo Toda una Vida 2017 – 2021, específicamente en el segundo eje "Planificamos para toda una vida", que busca proteger a las personas más vulnerables y así garantizar plenamente los derechos de las personas durante toda su vida. Este plan busca transformar las condiciones de vida de la población a través de un trabajo sostenido en la reducción de factores de riesgo, el fortalecimiento de capacidades y la generación de oportunidades mediante una intervención integral.
Este Plan se ejecuta a través de 7 Misiones, las cuales permiten avanzar en la consolidación de un piso de protección social, destacando principalmente a la tercera misión “Mis Mejores Años” que es una propuesta operativa del Estado Ecuatoriano orientada a las personas adultas mayores, que tiene como objetivo promover el envejecimiento activo y saludable, así como mejorar la calidad de vida de las personas mayores de 65 años, especialmente aquellas en condiciones de vulnerabilidad.
La ejecución de este proyecto busca promover el envejecimiento activo y generar oportunidades para que las personas adultas mayores puedan decidir su nivel de compromiso y participación en la comunidad. Se enfoca en la prevención, protección y restitución de los derechos de esta población a través de servicios de atención en el domicilio y espacios activos.
La atención domiciliaria se centra especialmente en los adultos mayores que necesitan asistencia debido a la dispersión geográfica de sus residencias, problemas de salud, discapacidad o dependencia. Por otro lado, los espacios activos, están ubicados estratégicamente en los Barrios Corazón de Jesús, San Miguel y el Centro de Sayausí, donde se proporciona un entorno propicio para que los adultos mayores participen en diversas actividades destinadas a mejorar su bienestar físico, mental y social.
JUSTIFICACIÓN
Desde una perspectiva legal, la Constitución de la República del Ecuador reconoce los derechos de las personas adultas mayores y establece disposiciones específicas para garantizar su atención y protección. Los artículos 36, 37 y 38 de la Constitución destacan la importancia de proporcionar atención prioritaria y especializada en áreas como la salud, la inclusión social, y la protección contra la violencia a las personas entre ellas las personas adultas mayores. También se enfoca el desarrollo de políticas públicas y programas destinados a fomentar su autonomía personal y participación en la sociedad, así como la promoción de actividades recreativas y espirituales.
Además, según el Código Orgánico de Organización Territorial Autonomía y Descentralización (COOTA), la junta parroquial tiene la competencia de planificar el desarrollo parroquial y proponer proyectos en beneficio de la población. Por lo tanto, es responsabilidad de la junta parroquial involucrarse en el proyecto "Mis años dorados" y proporcionar el presupuesto necesario para mantener la infraestructura física y los equipamientos requeridos para el proyecto. Esto es fundamental para garantizar que los adultos mayores tengan acceso a los servicios y actividades necesarios para mejorar su calidad de vida y bienestar emocional.
Es importante recalcar que el envejecimiento es un proceso natural que ocurre a medida que las personas envejecen. A medida que envejecemos, es normal que experimentemos cambios en nuestra mente, cuerpo y relaciones sociales. Estos cambios pueden hacer que dicha población se vuelva más vulnerable a problemas de salud y a depender de otros.
En Corazón de Jesús, muchos adultos mayores enfrentan dificultades para relacionarse socialmente debido a problemas de autoestima. Esto puede llevar a sentimientos de soledad, aislamiento y, en algunos casos, depresión. La problemática afecta de manera directa a los adultos mayores.
Por lo tanto, a través de nuestra intervención en este proyecto proponemos abordar este problema ayudando a los adultos mayores a mejorar sus habilidades sociales y su autoestima. Si se lleva a cabo con éxito, este proyecto podría marcar una gran diferencia en la calidad de vida de los adultos mayores y fortalecer las conexiones sociales en la comunidad.
DEFINICIÓN DEL PROBLEMA
El problema a abordar en este caso se enfoca en la baja autoestima del adulto mayor en las parroquias rurales del cantón Cuenca, específicamente en la parroquia Sayausí, ya que muchos de los adultos se sienten insuficientes con el hecho de que con la vejez se pierden capacidades físicas y mentales lo que provoca que el autoestima disminuya con el paso el paso de los años, lo que se busca mediante este proyecto es promover una mejor calidad de vida y bienestar psicológico y mental de sus habitantes longevos mediante la introducción de actividades que fomenten su autonomía.
Otro problema que se encuentra es la necesidad de inclusión social del adulto mayor ya que existen casos en los que ellos son excluidos contra su voluntad o carecen de la capacidad de acción para integrarse por sí mismas, o eligen autoexcluirse del resto de la sociedad, para este caso se propone espacios donde se incluye el apoyo de la familia, de la comunidad y su propia autosuficiencia.
APROXIMACIÓN TEÓRICA
Los adultos mayores, conocidos comúnmente como personas de la tercera edad o ancianos, forman parte de la etapa de la adultez tardía, adultez mayor o vejez y son en palabras sencillas, aquellas personas que han alcanzado una etapa avanzada de la vida.
Existen diversas concepciones de la etapa adulta mayor, así bien, según la Organización Mundial de la Salud la adultez mayor es una etapa del desarrollo del ser humano que inicia a los 60 años y termina en el momento en el que la persona fallece, y se caracteriza por ser un periodo de grandes cambios en todas las áreas de funcionamiento (OMS, 2006).
Del mismo modo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), establece la edad de 60 años para considerar que una persona es adulta mayor.
Sin embargo, en diferentes países se considera que la vejez empieza a los 65 años, tal es el caso de Ecuador, cuya constitución reconoce como personas adultas mayores a las ciudadanas y ciudadanos que tienen 65 años de edad o más.
Poder decir en tal caso que la adultez tardía como se denomina esta etapa dentro del campo de la Psicología aparece entre los 60- 65 años y es una etapa en la que están presentes una serie de cambios de tipo natural, gradual, continuo e irreversible, tanto a nivel biológico como psicológico y social, Algunos de los principales cambios que se presentan en esa etapa son:
Cambios Físicos
A medida que las personas envejecen, experimentan una serie de cambios físicos. Estos incluyen la pérdida de densidad ósea, la disminución de la fuerza muscular, la reducción de la capacidad cardiovascular y la aparición de condiciones crónicas, como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares (Chodosh et al., 2004). Estos cambios pueden influir en la percepción que los adultos mayores tienen de sí mismos y su autoestima.
Cambios Emocionales
La tercera edad también es una etapa en la que se experimentan cambios emocionales significativos. La pérdida de amigos y seres queridos, así como la reflexión sobre la propia vida y el cumplimiento de metas, pueden dar lugar a una variedad de emociones, incluyendo la depresión y la ansiedad (Blazer, 2003). Estos factores emocionales pueden impactar la autoestima en adultos mayores.
Cambios Sociales
La jubilación y la pérdida de roles profesionales y sociales son comunes en esta etapa de la vida. La falta de roles activos y la percepción de no ser valiosos o productivos en la sociedad pueden afectar la autoimagen (Gilleard & Higgs, 2000). Además, la discriminación por edad y el estigma social también pueden influir en la autoestima de los adultos mayores (Levy, 2009).
Todos estos cambios simultáneos o complementarios a la pérdida de capacidades hacen sentir a las personas adultas mayores que ya no son útiles, sentimientos que resultan muchas veces en baja autoestima, lo que a su vez desemboca en situaciones de aislamiento y consecuentemente depresión de las personas adultas mayores, lo que hace que el trabajo en la inclusión de los adultos mayores se conciba como de suma importancia.
Es importante mencionar que un factor indispensable para trabajar la dimensión de autoestima con adultos mayores es la inclusión en la sociedad pues si hacemos alusión a Erik Erikson, un destacado psicólogo del desarrollo, la última etapa de la vida, que él llamó "integridad vs. desesperación", se caracteriza por la búsqueda de una sensación de integridad y satisfacción con la vida vivida. La participación en actividades sociales y comunitarias proporciona a los adultos mayores oportunidades para reflexionar sobre sus vidas, compartir sus experiencias y contribuir a la sociedad, lo que en última instancia fomenta una sensación de integridad y autoestima.
Luna (1999) indica al respecto que los adultos mayores que tienen una vida social activa mediante las relaciones sociales (familiares, vecinales o comunales) o mediante su participación en actividades como deporte, arte, cultura, turismo y recreación, a través de las cuales se proporcionan una buena salud física y mental; cuentan con mejores armas para hacer frente a situaciones que en otra condición los haría enfermarse o caer en depresión. Por el contrario, aquellas personas que evitan la integración social se muestran frustradas y molestas.
Carmona (2015) En este contexto indica que la participación en actividades sociales, productivas y de tiempo libre al igual que las relaciones sociales y familiares respaldan el autoconcepto y mantienen el bienestar personal, esto es importante pues el autoconcepto está muy ligado a la autoestima, siendo que teniendo un autoconcepto positivo tendremos un autoestima alto.
Frente a este panorama se han implementado diversas políticas públicas con el fin de beneficiar a la población adulta mayor y promover su inclusión dentro de la sociedad, en este sentido surge el proyecto “Mis años dorados” implementado por el GAD parroquial de Sayausí, fundamentado en la ley del anciano y la constitución del Ecuador, las cuales están enfocadas a garantizar un nivel de vida que asegure a la población una buena alimentación, vestido, vivienda digna, asistencia en salud física como psicológica, servicios sociales, desarrollo personal, entre otros (Gutiérrez, 2014) con el fin de promover un envejecimiento activo y saludable que facilite la inclusión social de estas personas adultas mayores.
OBJETIVOS
Objetivo General:
Promover el bienestar integral del adulto mayor a través del desarrollo de actividades que fomenten un envejecimiento activo y saludable.
Objetivos Específicos:
Comprender la realidad que viven las personas adultas mayores en el sector en cuestión con referencia a emociones.
Identificar casos que requieran seguimiento y/o acompañamiento.
Desarrollar actividades que contribuyan a mejorar la autoestima de los adultos mayores.
Acompañar a los adultos mayores en espacios interactivos.
PARTICIPANTES
La personas adultas mayores que se han considerado como participantes del proyecto corresponden a las que residen en el barrio “Corazón de Jesús” y que están inscritos en el programa “Mis años dorados” figurando en la base de datos gestionada por el GAD Parroquial de Sayausí, que en total suman 16 adultos mayores.
METODOLOGÍA
En este proyecto se empleará una metodología mixta, pues utilizaremos métodos de recolección de información cualitativos y cuantitativos.
- Metodología Cuantitativa
Se utilizará una Metodología Cuantitativa mediante el uso del Test de Valoración Gerontológica Integral buscando mediante esta herramienta poder medir de manera objetiva factores de riesgo relacionados con los adultos mayores tales como: situación económica, deterioro cognoscitivo, depresión y malos hábitos alimenticios.
- Metodología Cualitativa
Se utilizará una Metodología Cualitativa iniciando con un transecto que nos permitirá analizar la realidad de de la población, se buscará recorrer el territorio y hacer una observación detallada de los distintos elementos que lo conforman, tales como la infraestructura, los espacios públicos, los servicios, las viviendas, la actividad económica, el transporte, entre otros.
Desde una perspectiva cualitativa, se pueden utilizar además las entrevistas que nos permitirán obtener información detallada y profunda sobre las experiencias, percepciones y opiniones de las personas involucradas en este proyecto. Los grupos focales son otra técnica que se podría utilizar donde se convocaría a diversos grupos de personas pertenecientes a esta población.
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